La agencia Reuters informa hoy que Microsoft recibirá una advertencia antimonopolio de la Comisión Europea, en la que se detallarán las objeciones de la organización a la compra de Activision Blizzard.
Este documento será enviado a la empresa de Redmond en las próximas semanas, antes de que se cumpla el plazo del 11 de abril fijado por la Unión Europea para emitir su veredicto sobre la operación.
Esta posición por parte de la UE no sorprende si tenemos en cuenta que las autoridades reguladoras del Reino Unido (CMA) y Estados Unidos (FTC) ya habían decidido investigar más a fondo el tema. En el caso norteamericano, efectivamente, parece que las diferencias se resolverán en los tribunales.
Se espera, en todo caso, que Microsoft haga algunas concesiones para convencer a las autoridades competentes de los diferentes mercados. Según informes de Reuters, ya ha habido un diálogo informal entre ambas partes, y estas conversaciones continuarán.
Una de estas concesiones sería, por ejemplo, el acuerdo que Microsoft alcanzó hace unas semanas con Nintendo para comprometerse a publicar los juegos de la saga Call of Duty en las consolas de la compañía japonesa durante los próximos diez años. Esta propuesta también fue trasladada a Sony, aunque en este caso parece haber sido rechazada.
La intención de Microsoft era concretar la compra de Activision Blizzard este mismo año, aunque la situación actual en diferentes mercados, con las reticencias de sus organismos reguladores, podría alargar sustancialmente el proceso.
Mientras tanto, la compra ya ha sido aprobada por las autoridades en otros mercados, en particular los de Brasil, Arabia Saudita y Serbia.